viernes, 21 de febrero de 2014

Violin (Gay Short Film)

Hola de nuevo.

Motivada por un cortometraje brasileño - del cual tal vez hable mas adelante- volví a explorar con afán el mundo de los cortometrajes de temática gay, topándome en el camino con diferentes obras desde pésimas hasta brillantes. Entre todo este mundo una de las que mas llamo mi atención con la simple mención del título fue "Violin". Gusto mucho de la música clásica, por lo tanto este título formó un sentimiento especial en mi, una atracción casi instantánea y sin pensarlo mucho, me dispuse a ver el cortometraje. 

A mi parecer el principal impacto de un cortometraje viene dado por esos pequeños detalles que te ayudan a transmitir un sentimiento. Es el aprovechamiento al máximo de la expresión "una imagen vale mas que mil palabras", aprovechando cada cuadro para reforzar el desenlace de la historia, elemento que en este corto en especifico es usado a la perfección. Desde las actuaciones hasta la escenografía acompañan bastante cualquier sentimiento puesto en el corto y van armando paso a paso la historia, incluso sin necesidad de mencionarlo, aquí el efecto es totalmente visual, muy a pesar de que el dialogo también se encuentra muy bien estructurado. 

Muy a mi pesar no puedo ofrecer una "sinopsis" del corto, pues su poca duración y la estructura del mismo lo vuelven una historia continua con un "desenlace" abierto, por lo cual mi explicación sobre el mismo abarcara la totalidad de la historia. Ofreceré sin embargo el link del vídeo para que puedan verlo por ustedes mismos:



La historia en sí, es un elemento bastante simple, todo gira en torno a un encuentro consentido pero no culminado, un encuentro sin resolución como cualquier persona puede tener en su vida. Sin embargo, exploremos lo verdaderamente interesante de este encuentro, sus personajes.



Empecemos por Oli. Oli es el primer personaje que aparece en el corto, es el violinista. Al principio lo vemos tocando el violín con poca, o casi ninguna pasión, sacando una melodía muy bonita de el, solo para que al final de la tonada se vea en el una cara de decepción, de vacío. La escena siguiente, de él caminando por la calle para después detenerse a sacar su teléfono no es entendible hasta después, donde observamos a un Oli recién salido de la ducha recibiendo a un invitado en su casa,  Jan, el cual resulta ser un vendedor de drogas. El comportamiento de Oli al principio es algo tímido, un poco desesperado, se nota su apuro por salir del asunto, él simplemente desea culminar con el negocio y relajar lo que sea que perturbe su relación con el violín mediante la droga, mientras que Jan, en contraste, se muestra mas seguro, indagante, casi demasiado curioso, hasta descubrir los instrumentos musicales de Oli.

En esta parte empieza a brotar, a burbujear en la superficie un cambio en las actitudes de ambos personajes, Oli por su parte se empieza a mostrar mas seguro, mas abierto. Jan por su lado se abre de igual forma pero eso lo hace adquirir una actitud mas suave, se siente atraído por el violín, siendo el mismo un músico frustrado y convence a Oli de tocar algo para él. La primera tonada de Oli en insulsa, rápida, potente y grotesca. La verdad poco de atractivo puedes encontrarle a la manera en la que toca en esa escena, remarcando su apuro con el asunto. Mas adelante, con mas comodidad y menos recelo, Oli encuentra algo en la compañía de Jan que le permite tocar la música con sentimiento, con real compromiso, una escena verdaderamente atrayente y que por supuesto influencia mas la curiosidad de Jan por el instrumento, insistiendo a Oli que le enseñe a tocar.

A partir de aquí Oli toma total control sobre la situación, ha sentido la comodidad de manipular el violín con Jan cerca y de a poco propicia un nuevo acercamiento. Por otra parte Jan, ya sea por la atracción hacia la pasión de Oli por la música, o por la influencia de este ultimo, se ve de igual forma cómodo con Oli y la pasión musical se vuelve una atracción irresistible que lo arrastra, que lo lleva a desviar su atención de violín y enfocarla en Oli. Es eso de que la pasión en la música no viene del instrumento, sino del músico y mas temprano que tarde el interés de tocar el instrumento se transfiere al interés por tocar a Oli. He de decir que aquí me pareció, falto algo en la escena, que me hicieran sentir mas tensión entre ambos, mas pasión (no necesariamente mostrármela, solo que me la hicieran sentir), sin embargo la escena no esta mal hecha y consigue hacerte contener la respiración aun sin darte cuenta.



Por otro lado, y saltando mi decepción por esa escena, el mundo real llama, literalmente hablando, el teléfono de Jan suena en lo que suponemos pretende ser otro encargo y él vuelve a la realidad, la magia del momento, la atracción irresistible hacia Oli se rompido y ya para su salida de escena, el espectador, al igual que Oli, extraña poco o nada la billetera de este ultimo, el pago de Jan, el robo del mismo, se vuelven algo olvidable. El rastro etereo que dejó el acercamiento va esfumándose con cada segundo y la decepción en Oli es notable. Al guardar el violín el personaje lo hace meticulosamente, como si al cerrar ese estuche cerrara ese evento por siempre de su cabeza. Sin embargo el apuro por la droga ha pasado, ya lo que lo perturbaba antes desapareció, aunque se puede observar que parece sentirse perturbado de una forma diferente.

Contener todo ese desarrollo de los personajes, los diferentes sentimientos perceptibles y un apropiado desenlace hacen que este corto para mi fuese una verdadera maravilla. Desarrollar personajes en 11 minutos de una forma que cierta autora - cofcofE.L.Jamescofcof- no consigue ni en 3 libros es realmente algo que remarca una buena historia, no solo eso, una apropiada narrativa. La simplicidad de la trama y de la escena del cortometraje, solo lo hace mas genial ante mis ojos y no puedo sino terminar esta entrada diciendo que en su totalidad me fascino. Como ya mencioné mi única decepción fue la escena de "intimidad" entre ellos y sin embargo es una escena bien hecha, bien lograda, por lo cual no disminuye mi admiración por el cortometraje, un muy buen trabajo.

P.D: la fotografía también esta muy bien hecha.


Muy bueno


Comprobando que poco puede ser mucho, me despido. 






2 comentarios:

  1. Ya lo leí, de verdad que te gusto, bueno no es para menos. Aunque mis gustos son un poco más simples, lo suficientes como para no enfocarme tanto en su pasión hacia el instrumento pero si en la curiosidad de Jan. Once minutos que para cualquier película de dos horas es una estrella inalcanzable.
    Me gusto tu reseña.

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    1. Muchísimas gracias por el comentario. Me agrada mucho que te gustara mi reseña, la hice con mucho cariño.

      Espero seguirte viendo por aquí ^^

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